El Grito es del pueblo porque es símbolo de la inconformidad, afirma
López Obrador realizó ayer su 47 reunión informátiva en el Zócalo Foto Carlos Ramos Mamahua
El gobierno que surgirá de la convención nacional democrática (CND) tendrá carácter itinerante, ya que si bien su sede será la capital del país, su titular "recorrerá todos los pueblos, todas las regiones de México", adelantó anoche Andrés Manuel López Obrador.
Hizo referencia a Benito Juárez no sólo con la llamada presidencia itinerante, sino también con llevar a cabo la próxima reunión de la CND el 21 de marzo de 2007, en la conmemoración del natalicio del Benemérito de las Américas.
En un Zócalo donde comenzaron a ser desmanteladas las carpas para dar cabida a la gente que se trasladó anoche de varios puntos de Reforma, Juárez y Madero, a fin de no ceder espacio a la celebración oficial del Grito de Independencia, López Obrador dio otras definiciones: el nuevo gobierno, su titular y el gabinete se mantendrán de la "cooperación ciudadana", no será de privilegios, sino austero y sobrio.
La convención, además, aprobará un plan de resistencia civil pacífica, que incluirá desde portar el moño tricolor "hasta las acciones del primero de diciembre, cuando el pelele busque tomar posesión".
Para ese fin, confirmó, se creará una comisión especial de la resistencia y, paralelamente, se integrará otra encargada del plebiscito para preguntar a los ciudadanos si se impulsa un nuevo constituyente, "que transforme las instituciones y reforme la Constitución".
También aclaró que ese gobierno se distinguirá por su protocolo republicano, en el cual no tendrán cabida términos y usos monárquicos, como el de "primera dama" ni el de "pareja presidencial", ya que el pueblo sólo elige a un presidente de la República.
En ese punto, hizo notar que no se reditará lo que ocurrió en los pasados seis años, cuando Fox acentuó la idea de que debe haber una "primera dama", y las miles de mujeres que asistieron a la asamblea informativa del día 47 de la resistencia civil pacífica le gritaron un rotundo "¡nooooo!", aunque algunas, gozosas, levantaron el índice y gritaron "¡yooooo!"
López Obrador detalló que, como ese, hay muchos ejemplos y deberá definirse todo un protocolo para quien encabece el nuevo gobierno del pueblo. Asimismo, cuándo toma posesión formalmente del cargo el titular del gobierno itinerante, si el 20 de noviembre o el primero de diciembre.
La asamblea informativa de este miércoles comenzó con la intervención de Víctor Hugo Círigo, coordinador de los 46 diputados perredistas en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal --presentes en el templete--, quien refrendó el respaldo de los legisladores capitalinos a López Obrador y al movimiento de protesta contra el fraude electoral y la imposición.
Después, el tabasqueño comenzó su discurso de 35 minutos con un homenaje a la memoria de los Niños Héroes: "hoy se cumplen 47 días y se conmemora la gesta histórica que simboliza la defensa del Castillo de Chapultepec. Por eso nuestra gran Bandera Nacional está a media asta.
Recordó que hace 159 años, los cadetes del Heroico Colegio Militar defendieron la patria ante la invasión extranjera. "Fueron momentos aciagos, tristes, que se registran en nuestra historia, porque la intervención extranjera provocó que se izara en Palacio Nacional la bandera estadunidense".
Por eso, recalcó, la ceremonia del Grito de Independencia surge de la protesta ciudadana, aunque después la oligarquía de principios del siglo pasado lo ligó con el cumpleaños de Porfirio Díaz. "Pero la historia es otra, tiene que ver con la inconformidad social. Por eso conmemoramos esa fecha y a mí me da mucho gusto, como creo que a ustedes, estar en esta época luchando por reafirmar los principios de justicia, democracia, soberanía y de dignidad.
"¡Que vivan los Niños Héroes!", exclamó, y sus seguidores respondieron: "¡vivan!" Más adelante entró de lleno a los detalles de la convención que se realizará a cabo dentro de dos días. De entrada, precisó que ya hay 755 mil delegados registrados, por lo que se llegará a la meta de un millón de participantes, inclusive más. La asamblea, dijo, será un parteaguas en la historia del país.
A partir de mañana comenzará a circular un folleto con las principales propuestas de acuerdo para que los delegados las conozcan y tengan todos los elementos de discusión.
En ese sentido, por la mañana, Jesús Ortega adelantó que serán instaladas las mesas de debate en las avenidas Juárez, Madero y Reforma, en el Zócalo y sus alrededores y en el Monumento a la Revolución. Ricardo Monreal, por su parte, detalló que el sábado se pretende desahogar todos los puntos de la convención, para que un día después comiencen a aplicarse los resolutivos.
En tanto, López Obrador se refirió a los puntos centrales del debate: si se reconoce o no al gobierno de la usurpación; la vigencia de la República simulada o se declara la abolición del régimen de corrupción y privilegios; crear un gobierno legítimo o una coordinadora nacional de la resistencia civil; si la CND ratifica un presidente de México, un titular del Ejecutivo, un jefe de la resistencia o un coordinador de la resistencia civil pacífica.
De nueva cuenta, los miles de perredistas congregados en el Zócalo se adelantaron a la resolución del sábado: "¡presidente, presidente..!", coro al que se sumaron los dirigentes y legisladores que lo acompañaban en el templete.
Cuando los gritos se apagaron, el tabasqueño detalló que si se decide constituir un nuevo gobierno, éste deberá contar con un gabinete, cuya integración decidirán los delegados. Además, contar con una sede para que despache el nuevo presidente. "¡Palacio, palacio..!", exclamó la gente.
Y anticipó que, en ese caso, será un gobierno itinerante que tendrá como sede la ciudad de México pero recorrerá todo el territorio nacional.
Confirmó que los acuerdos de la convención deberán adoptarse de manera voluntaria, porque el movimiento tiene la característica de la libertad, de la pluralidad y de la diversidad, y por ello expresó que no acepta la discriminación. "Nos rebelamos ante el racismo, que desgraciadamente ha brotado en estos días. Los de arriba se sienten de sangre azul, insultan a nuestro movimiento, lo califican como de desarrapados, de chusma, de nacos. Eso no lo permitimos de ninguna manera".
López Obrador ratificó el sentido de unidad alrededor del movimiento, pese a que inmediatamente después del 2 de julio "comenzaron a tirar lazos a los dirigentes de la coalición, para ver si caían en la práctica de siempre de la cooptación disfrazada de negociación. ¡Nadie ha caído! Todos los dirigentes actúan con dignidad y decoro, no hay fisuras en el movimiento".
En su caso, recalcó, está "tranquilo, contento, optimista, feliz y no estoy fingiendo. Estoy muy contento, porque ya encontramos la salida, ya está el camino, vamos a iniciar una etapa nueva".
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